Mano con un celular y detrás una computadora
Métodos y técnicas de enseñanza

Estudio de caso

¿Qué es?

Es una de las estrategias que, en mayor grado, facilita el desarrollo de las capacidades y competencias.

Refleja situaciones más o menos complejas, similares a las que se enfrentarán los futuros profesionales, una vez egresados de la universidad. Por lo cual, constituye un método eficaz para construir el aprendizaje, así como para la aplicación de los conocimientos teóricos, en la resolución de problemas similares a los reales.

¿Para qué se usa?

Como método de enseñanza, los casos son disparadores y promotores de la reflexión, desde la acción.

Por tener como finalidad el debate de un hecho o de una situación –previamente relevada y escrita– permiten el abordaje directo de los problemas, que aparecen en las situaciones profesionales, sobre las que se desea trabajar. 

Se utiliza a los efectos de:

  • Facilitar procesos cognitivos complejos, tales como la reflexión, el análisis, el pensamiento crítico, la toma de decisiones, la valoración.
  • Aprender una serie de procedimientos y actitudes, que se utilizan en la práctica del ejercicio profesional: aprender a “saber actuar”.
  • Saber fundamentar y contrastar los argumentos, con las opiniones del resto del grupo.
  • Promover el aprendizaje autónomo y el trabajo colaborativo.

Evaluación

La evaluación del aprendizaje, por medio del método de casos, permite valorar la capacidad o las competencias de un estudiante, ante una situación específica de la actividad y del contexto profesional.

De acuerdo a los objetivos que se hayan elaborado, permite evaluar distintos niveles de competencias, tales como resolver problemas, razonar críticamente, analizar y comparar datos, comunicar en forma efectiva, recoger información, fundamentar y argumentar, aplicar conceptos aprendidos en una situación real, presentar informes orales y escritos. 

Generalmente, los estudios de casos se evalúan a través de diversas herramientas –ejercicios, preguntas, simulaciones–, que son preparadas a partir del caso, a los efectos de promover su solución o discusión.

Algunos indicadores a tener en cuenta

  • Claridad en el planteamiento de la solución al problema.
  • Fundamentación de la propuesta de solución, a la luz de la teoría revisada.
  • Comparación de la solución planteada, con otras alternativas.
  • Congruencia entre la información y las conclusiones.
  • Forma de presentación (oral o escrita): debe tenerse en cuenta la claridad en la redacción, la forma y el estilo, así como la sintaxis y la ortografía.
  • Calidad del trabajo grupal.
  • Intervenciones en el plenario. 

Ver también:

Elaborado por Liliana Jabif (2007). Extraído de “La docencia universitaria bajo un enfoque de competencias”. Ed. U. A. Ch.