Clasificación: Enseñar
-
Duración
Corta
-
Dificultad
Media
-
Participantes
Docentes y estudiantes
¿Qué puedo hacer?
Utilizar este enfoque implica que:
- Los miembros del grupo deben tener claro que los esfuerzos de cada integrante no solo lo benefician a él mismo, sino también a los demás miembros. Los integrantes del equipo deben ser conscientes de que sin la cooperación de cada miembro no es posible alcanzar una meta común. Es decir, que sus logros dependen de los logros de los otros miembros del equipo. Esto se denomina interdependencia positiva.
- El grupo debe asumir la responsabilidad de alcanzar sus objetivos, y cada miembro será responsable de cumplir con la parte del trabajo que le corresponda. Esto se denomina responsabilidad individual y grupal.
- Los estudiantes deben realizar juntos una labor en la que cada uno promueva el éxito de los demás, compartiendo los recursos, ayudándose y respaldándose. Esto se denomina interacción estimuladora.
- El grupo debe analizar en qué medida están alcanzando sus metas y manteniendo relaciones de trabajo eficaces. Esto se denomina evaluación grupal.
Las siguientes actividades promueven que se apliquen los principios del aprendizaje basado en equipos y ayudan a dinamizar los contenidos que vayamos a trabajar en la clase.
- Secuenciación: cada miembro recibe información –por mensaje de chat o a través del correo electrónico–, que es parte de una secuencia que el equipo debe reconstruir. Los estudiantes trabajan discutiendo el posible orden de la secuencia de la información. Los diferentes equipos comparten lo realizado y se analizan similitudes y diferencias entre su trabajo y el de los otros equipos.
- Encuentre a alguien que: el docente pide a los equipos que realicen una lluvia de ideas sobre un tema, en forma de listado. Luego, los miembros del equipo buscan a integrantes de otros equipos, que hayan seleccionado la misma información y, cuando encuentran a alguien que lo haya hecho, discuten si ambos se orientaron al mismo concepto o comprenden igual la información que han elaborado. Aquí se trabaja primero en salas de equipos y, después, en plenario.
- Encuentre la ficción: el docente provee a cada equipo de tres enunciados, de los cuales dos son verdaderos y uno es falso. Los equipos discuten cuál es el falso y por qué. También se preparan para dar explicaciones y evidencias durante el plenario.
- Mesa redonda: a cada equipo se le asigna una pizarra virtual, por ejemplo, Jamboard de Google. El docente propone un tema para realizar una lluvia de ideas. Los estudiantes se turnan para ir registrando una idea cada uno. Todo se hace en silencio. Finalizado el tiempo, los equipos comparan su producción, a través de la función de compartir pantalla.
- Técnica de rompecabezas: en equipos base, los estudiantes exploran conjuntamente lo que saben sobre un tema. Posteriormente, el docente divide a los equipos base en equipos de expertos –conformados con un integrante de cada uno de los equipos base– y les da a cada uno información sobre un aspecto del tema o les solicita que la busquen. Los expertos aprenden sobre el tema y, luego, retornan a sus equipos base, para trabajar con otros, completando una tarea o actividad en la cual cada uno aporta un aspecto del tema.
- Cabezas juntas numeradas: en cada equipo, los miembros se numeran del 1 al 4 (en caso que sean cuatro miembros). El docente propone un problema o plantea una pregunta. Los miembros del equipo elaboran, conjuntamente, una respuesta y se aseguran de llegar a un consenso –esto puede hacerse por medio de las salas de equipos o, para ahorrar tiempo, por medio del chat o del grupo de WhatsApp–. El docente indica qué número responde la pregunta y solo quienes tengan ese número, en cada equipo, lo hacen.
- Pensar, consultar, compartir: el docente realiza una pregunta o propone un problema. Los estudiantes trabajan en forma individual, en un tiempo determinado. Posteriormente, comparten su respuesta con un compañero y llegan a un consenso respecto a la misma. Por último, los pares comparten sus respuestas y buscan consenso.
- Pasaporte parafraseado: el docente realiza una pregunta o propone un problema. Cada miembro del equipo explica su respuesta, en forma oral e individual. Sin embargo, para poder dar la respuesta propia, primero debe explicar, con sus propias palabras, la respuesta que dio el participante que lo precedió.
- Embajadores: el docente propone una tarea en la cual los estudiantes tengan que construir –en grupos– un gráfico, un mapa conceptual, o una infografía, relacionada con el tema de la clase. Luego que los equipos han finalizado, uno o dos miembros visitan a otros equipos con su producción. Los miembros del equipo que recibe a los embajadores pueden corregir, contribuir, agregar o eliminar información al trabajo de los embajadores. Los embajadores regresan a sus grupos y comparten la nueva versión de su trabajo.
- Buzón de entrada: los equipos construyen un problema, ejercicio o tarea relacionado con el tema de la clase y lo escriben claramente. Posteriormente, lo envían a otros equipos para que lo resuelvan.
Adaptado y traducido de: Díaz Maggioli, G. & Painter-Farrell, L. (2016). Lessons learned: First steps towards reflective teaching in ELT. Richmond.
Claves para el éxito
- Organizar los equipos de antemano. Si se utiliza Zoom, prediseñarlos al agendar la clase.
- Visitar a los grupos cuando están trabajando, de forma de evaluar cómo están encarando la labor y si están orientados a lo que el docente quiere enseñar.
- Al finalizar cada dinámica grupal, asegurarse de que se evalúe el proceso (¿cumplieron los estudiantes con lo que se les solicitó?), la tarea (¿permitió esta tarea que los estudiantes aprendieran algo nuevo?) y el producto (discutir el resultado esperado).
Para saber más
- El canal de YouTube Ítaca IES presenta una gran variedad de técnicas de aprendizaje cooperativo, demostradas a través de clases dictadas en educación secundaria. Las mismas pueden resultar mucho más eficaces a nivel universitario.